Información de carácter oficial sobre el Cuadro Macroeconómico 2022-2025 del Gobierno español.
España remite a la Comisión Europea unas perspectivas macroeconómicas y fiscales marcadas por la máxima prudencia ante la elevada incertidumbre de la guerra:
- El escenario económico, avalado por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), prevé que la economía española mantendrá una senda de crecimiento durante todo el periodo de previsión, especialmente intensa en 2022 (+4,3%) y 2023 (+3,5%).
- El crecimiento de la economía española será superior al de las principales economías avanzadas por el dinamismo del mercado laboral, el crecimiento del consumo, la recuperación de la actividad turística y el impulso de la inversión potenciado por el Plan de Recuperación.
- Gracias a la reforma laboral, se prevé una mejora en la calidad del empleo y un importante descenso de la tasa de paro a lo largo del periodo de previsión, hasta situarse por debajo del 10% en 2025
- España cerró 2021 con la mayor reducción del déficit público de su historia y mantendrá la senda descendente durante todo el periodo 2022-2025: este año cerrará en el 5%, para retroceder hasta el 3,9% en 2023, el 3,3% en 2024 y el 2,9% en 2025
- El Programa de Estabilidad refleja que es compatible mantener las medidas de apoyo a familias, autónomos y empresas y mejorar el saldo presupuestario
- La Administración Central ha realizado en los últimos años un apoyo sin precedentes a las Comunidades Autónomas, que han registrado un fuerte incremento de ingresos para blindar el Estado de Bienestar.
- La reducción del déficit y el crecimiento económico permitirán seguir reduciendo la ratio deuda/PIB por debajo del 110% en 2025, continuando la senda de descenso iniciada ya en 2021, con una reducción de 1,6 puntos con respecto al año anterior.
La Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos ha actualizado el Programa de Estabilidad 2022-2025 y el Programa Nacional de Reformas 2022 para su remisión a la Unión Europea. El envío se efectúa en cumplimiento de la obligación de todos los Estados Miembros de presentar cada año en el mes de abril ante la Comisión Europea sus Programas Nacionales de Reformas y sus Programas de Estabilidad, en el marco del Semestre Europeo para la coordinación de las políticas económicas.
En ambos documentos, el Gobierno explica las medidas de política económica adoptadas para paliar el impacto de la guerra de Rusia en Ucrania, destinadas a compensar a los ciudadanos por el incremento del precio de la energía y los carburantes, y proteger a los colectivos más vulnerables y a los sectores más afectados; los efectos de las inversiones y reformas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, así como el escenario macroeconómico y fiscal para el periodo de referencia. El nuevo cuadro macroeconómico ha sido avalado por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF).
Programa de Estabilidad 2022-2025
El Programa de Estabilidad incluye el escenario macroeconómico previsto para el periodo 2022-2025, apoyado en la última información disponible. La vicepresidenta primera del Gobierno ha señalado que “en el contexto actual de elevada incertidumbre por la situación geopolítica internacional y la fuerte subida de los precios de la energía, el escenario macroeconómico y fiscal está marcado por el principio de máxima prudencia”.
La economía española se mantendrá en una senda de crecimiento económico a lo largo del todo el periodo de previsión, que será más intenso en 2022 y 2023, con unas tasas de crecimiento previstas del Producto Interior Bruto del 4,3% y del 3,5%, respectivamente.
En línea con los organismos nacionales e internacionales, se prevé un crecimiento superior al de las principales economías avanzadas, confirmándose la solidez del actual ciclo expansivo iniciado en 2021.
El alza de los precios de la energía, junto con el impacto negativo sobre las principales economías europeas está ralentizando la recuperación de la economía española tras la pandemia, que se había acelerado en el segundo semestre de 2021.
No obstante, en 2022 continuará a buen ritmo el crecimiento de la economía española apoyado, sobre todo, en la creación de empleo de calidad, la inversión en bienes de equipo y propiedad intelectual, la recuperación del turismo y el impulso de las inversiones y reformas del Plan de Recuperación.
El alza de los precios energéticos y el efecto base han provocado una aceleración del nivel general de precios desde mediados de 2021, que se ha intensificado a comienzos de 2022 por el impacto de la guerra. No obstante, todas las previsiones apuntan a una desaceleración significativa de la inflación desde el segundo semestre de 2022, hasta situarse alrededor del 2% el próximo año.
En este contexto, el nuevo cuadro macroeconómico prevé que la demanda interna sea el principal motor de crecimiento, y especialmente la inversión que se estima que se acelere este año hasta el 9,3%, apoyada en el Plan de Recuperación, cuyo despliegue seguirá ganando impulso en 2022 y 2023 a través de la plena ejecución de las inversiones, consolidando el cambio de patrón en la recuperación frente a crisis anteriores.
La concentración del Plan en proyectos estratégicos permitirá atraer inversión privada adicional, aumentando el factor multiplicador de los fondos y generando un efecto arrastre para el conjunto de la economía. Junto a las inversiones, las reformas en marcha están impulsando la transformación del tejido productivo, lo que se traducirá en un aumento de la productividad y del crecimiento potencial.
El dinamismo de la actividad turística será un elemento determinante para el crecimiento económico en 2022, con una recuperación del 80% del registrado en 2019, favorecido por un impacto más limitado de las olas del virus gracias a la elevada vacunación y a la recuperación de lo los principales mercados emisores.
Para el periodo 2022-2025, el empleo seguirá siendo el motor del crecimiento económico, consolidándose la senda de descenso de la tasa de paro, que pasará del 14,8% en 2021 hasta reducirse hasta el 9,6% en 2025, descenso que se acompaña de una mejora en la calidad del empleo, gracias al impulso de las inversiones y las reformas del Plan de Recuperación, especialmente los efectos positivos de la Reforma Laboral.
Dada la alta incertidumbre del contexto internacional, el cuadro macroeconómico prevé que la demanda externa tendrá una aportación negativa al crecimiento en 2022 y 2023.